La mayoría de las familias disfrutan reuniéndose para ver videos caseros. Es una oportunidad para revivir gratas memorias y entretenernos con nuestro pasado. Para algunos, sin embargo, la noche de proyección familiar no produce alegría y risa. Abre viejas heridas y lleva a las familias a la desesperación y la añoranza. Este desgarrador anuncio de servicio público les recuerda a las audiencias que la vida puede ser efímera. Un ser querido podría estar aquí en un momento y desaparecer al siguiente.